Leia atentamente en mi TL las palabras de @withmyheroes sobre los ídolos, la sociedad de mierda en la que vivimos, la subestimación hacia ellos -"pendejas unicornias" según el fundamentalismo- y el juzgamiento de parte de los más viejos y maduros hacia ellos por lo que ellos escuchan. Y no puedo no estar de acuerdo con ella.
Últimamente se ha creado una batalla campal entre diversos tipos de jovenes: Primero, estamos los partidarios del pop actual, los que consideramos que dentro de todo eso que algunos injustamente llaman como "comercial" o "mierda" hay artistas que nos agradan y que merecen todo nuestro apoyo. Y luego, estan los viudos de la música de hace 20 o 30 años, que se niegan a asumir que los tiempos cambiaron y que, si a un joven le gusta lo que considera un modelo a seguir, lo va a acompañar a donde sea.
Reconozco que era de lo segundo, incluso, si eres un lector nuestro de los más veteranos sabrás que pedía insistentemente que 40 Principales y Radio Carolina sean como las radios más "prestigiosas" como Concierto, Galaxia, Universo y la vieja FM Tiempo. Lo que no sabía es que esas radios en aquel entonces le daban a lo que estaba de moda, aunque no me agradaba -ni me agradará- el reggaetón.
Hoy ambas cambiaron su playlist musical y la radio del arcoiris se abre incluso al pop hipster, redujo su cuota de perreo e incluso, quizá por efecto de la ley del 20%, llegaron a la rotación los nacionales como Gepe, Javiera Mena e incluso el chascón Manuel García. La segunda es más tirada a la electrónica, no por nada son muy populares programas como "On the mix" o "Weekend Dance", y el espacio de música "urbana" se redujo a una modesta aparición en el programa de Javier Olivares.
Pero, ¿Qué pasa? Antes ambos tipos de jovenes eran amigos intimos quienes, hasta se tiraban unas tallas amistosas y hoy no son más que enemigos aparentemente irreconciliables, separadas por visiones igual de radicales sobre cómo debería ser la música de hoy. Algunos somos partidarios de que debe haber de todo en la viña del señor -siempre y cuando, por supuesto, no se ocupe el sexismo tipo reggaetón o Pitbull para vender, o como decía La Nueva Luna, "con letras que hablaban de amor sin tener que agredir a viva voz"-, mientras que otros, en una falsa y patética parada de "no seguir modas" se escudan en guitarreos, sonidos electrónicos y recuerdos de otros tiempos.
Si te gusta One Direction eres una pendeja unicornia. Si te gusta Katy Perry eres infantil. Si amas a Denise Rosenthal eres maricueca. Y no es más que eso: Segregación musical.
A mi me da lata cuando la tele no le da bola a los jovenes. Cuando "Alfombra Roja" aun era sano se ganaron el cariño de diversos clubs de fans que iban de público al programa, pero cuando viraron a la farándula dura murieron junto con la calidad de la TV chilena. Deberá ser por eso que viraron a entretenimiento sin sentido como "Yingo" o... ¿Lo digo o no lo digo?
Y por eso hago la puntualización: No me refiero a la copia de la copia de la copia de Mekano, sino que a, por ejemplo, lo que se está haciendo en países como Brasil, Japón o Corea del Sur. Más artistas, más cantantes, menos copucha en torno a personajes con más cuerpo que cerebro. ¿Por qué creen que el Music Bank Festival llegó a Chile con gran éxito, pese a que KBS World no está en ninguna cableoperadora? -y debería estarlo-.
Y lo que le pasa a esta persona también me pasa a mi. Muchos me miran raro porque en este blog se habla de cantantes que se que no son del gusto de todos -ni debería serlo, puesto que somos muy distintos, pero pienso que todos deben estar y verse reflejados en una TV abierta que hoy solo mira a las viejas de CEMA Chile- y porque pienso que es lo que la TV chilena debería mostrar. Y a veces, lo asumo, insistentemente.
Pero es, al menos, lo que yo creo, lo que yo pienso que se debería hacer en nuestro país. En Twitter sigo a varios fans club y gente de las llamadas "fandoms" y cuando los leo, sé que alguien debería capitalizar sus deseos de ver a sus artistas en nuestro país. Yo simplemente hago de vocero de ellos, porque es lo que nuestra tele hacía por historia, y ya no se hace según ellos porque no quieren competir con los conciertos, sin embargo es por pura y franca flojera. En Europa se convive perfectamente la tele con los recitales, lo mismo en Brasil, Norteamérica, el Asia-Pacífico. Y todos tipos de jovenes. Todos somos jovenes. Todos somos telespectadores.
Si les molesta que hable insistentemente de Katy Perry o de cualquier artista que a mi me agrade y consideran que eso es "panfleteo" o "la pataleta de un fanático", pues le voy a pedir por favor que me saque de todas sus redes sociales.
Pero yo seguiré pensando que una artista con vestidos un tanto estrafalarios y que luchó tanto por llegar al pedestal donde está debe tener cabida en nuestra televisión. Así cueste 500 mil dólares o un millón o tres millones o lo que sea. Así le guste a todos, o al 5% de los jovenes de hoy. Así marque 10, 15 o 30 puntos. Como decía Don Francis: "Esta es mi posición y yo respeto la suya", siempre y cuando no sea a favor de la farándula.
Y si usted piensa que yo adoro el pop anglo y no me gusta lo nacional, se equivoca. Yo creo en el talento hecho acá, yo sé que en nuestro país se pueden hacer mejores cosas que las que se hacen actualmente. Solo hay que tener ganas de hacer las cosas bien y no tener una mente siniestra hambrienta de fama o una portada de LUN. Yo apoyo a María Colores, Javiera Mena, Denise Rosenthal, Manuel García, Gepe, Carla Morrison, Camila Moreno, La Guacha, Chico Trujillo, Madvanna, y tantos otros que se destaquen sin necesidad de coludirse con un canal inescrupuloso para generar un tongo que cause rechazo.
Pero sepa que si hablo de ellos es por convicción de que esto lo tiene que mostrar la televisión abierta. Dejemos de lado los prejuicios, los fundamentalismos, las termeces y los radicalismos. Aquí nadie sobra.
Twittear
Últimamente se ha creado una batalla campal entre diversos tipos de jovenes: Primero, estamos los partidarios del pop actual, los que consideramos que dentro de todo eso que algunos injustamente llaman como "comercial" o "mierda" hay artistas que nos agradan y que merecen todo nuestro apoyo. Y luego, estan los viudos de la música de hace 20 o 30 años, que se niegan a asumir que los tiempos cambiaron y que, si a un joven le gusta lo que considera un modelo a seguir, lo va a acompañar a donde sea.
Reconozco que era de lo segundo, incluso, si eres un lector nuestro de los más veteranos sabrás que pedía insistentemente que 40 Principales y Radio Carolina sean como las radios más "prestigiosas" como Concierto, Galaxia, Universo y la vieja FM Tiempo. Lo que no sabía es que esas radios en aquel entonces le daban a lo que estaba de moda, aunque no me agradaba -ni me agradará- el reggaetón.
Hoy ambas cambiaron su playlist musical y la radio del arcoiris se abre incluso al pop hipster, redujo su cuota de perreo e incluso, quizá por efecto de la ley del 20%, llegaron a la rotación los nacionales como Gepe, Javiera Mena e incluso el chascón Manuel García. La segunda es más tirada a la electrónica, no por nada son muy populares programas como "On the mix" o "Weekend Dance", y el espacio de música "urbana" se redujo a una modesta aparición en el programa de Javier Olivares.
Pero, ¿Qué pasa? Antes ambos tipos de jovenes eran amigos intimos quienes, hasta se tiraban unas tallas amistosas y hoy no son más que enemigos aparentemente irreconciliables, separadas por visiones igual de radicales sobre cómo debería ser la música de hoy. Algunos somos partidarios de que debe haber de todo en la viña del señor -siempre y cuando, por supuesto, no se ocupe el sexismo tipo reggaetón o Pitbull para vender, o como decía La Nueva Luna, "con letras que hablaban de amor sin tener que agredir a viva voz"-, mientras que otros, en una falsa y patética parada de "no seguir modas" se escudan en guitarreos, sonidos electrónicos y recuerdos de otros tiempos.
Si te gusta One Direction eres una pendeja unicornia. Si te gusta Katy Perry eres infantil. Si amas a Denise Rosenthal eres maricueca. Y no es más que eso: Segregación musical.
A mi me da lata cuando la tele no le da bola a los jovenes. Cuando "Alfombra Roja" aun era sano se ganaron el cariño de diversos clubs de fans que iban de público al programa, pero cuando viraron a la farándula dura murieron junto con la calidad de la TV chilena. Deberá ser por eso que viraron a entretenimiento sin sentido como "Yingo" o... ¿Lo digo o no lo digo?
Y por eso hago la puntualización: No me refiero a la copia de la copia de la copia de Mekano, sino que a, por ejemplo, lo que se está haciendo en países como Brasil, Japón o Corea del Sur. Más artistas, más cantantes, menos copucha en torno a personajes con más cuerpo que cerebro. ¿Por qué creen que el Music Bank Festival llegó a Chile con gran éxito, pese a que KBS World no está en ninguna cableoperadora? -y debería estarlo-.
Y lo que le pasa a esta persona también me pasa a mi. Muchos me miran raro porque en este blog se habla de cantantes que se que no son del gusto de todos -ni debería serlo, puesto que somos muy distintos, pero pienso que todos deben estar y verse reflejados en una TV abierta que hoy solo mira a las viejas de CEMA Chile- y porque pienso que es lo que la TV chilena debería mostrar. Y a veces, lo asumo, insistentemente.
Pero es, al menos, lo que yo creo, lo que yo pienso que se debería hacer en nuestro país. En Twitter sigo a varios fans club y gente de las llamadas "fandoms" y cuando los leo, sé que alguien debería capitalizar sus deseos de ver a sus artistas en nuestro país. Yo simplemente hago de vocero de ellos, porque es lo que nuestra tele hacía por historia, y ya no se hace según ellos porque no quieren competir con los conciertos, sin embargo es por pura y franca flojera. En Europa se convive perfectamente la tele con los recitales, lo mismo en Brasil, Norteamérica, el Asia-Pacífico. Y todos tipos de jovenes. Todos somos jovenes. Todos somos telespectadores.
Si les molesta que hable insistentemente de Katy Perry o de cualquier artista que a mi me agrade y consideran que eso es "panfleteo" o "la pataleta de un fanático", pues le voy a pedir por favor que me saque de todas sus redes sociales.
Pero yo seguiré pensando que una artista con vestidos un tanto estrafalarios y que luchó tanto por llegar al pedestal donde está debe tener cabida en nuestra televisión. Así cueste 500 mil dólares o un millón o tres millones o lo que sea. Así le guste a todos, o al 5% de los jovenes de hoy. Así marque 10, 15 o 30 puntos. Como decía Don Francis: "Esta es mi posición y yo respeto la suya", siempre y cuando no sea a favor de la farándula.
Y si usted piensa que yo adoro el pop anglo y no me gusta lo nacional, se equivoca. Yo creo en el talento hecho acá, yo sé que en nuestro país se pueden hacer mejores cosas que las que se hacen actualmente. Solo hay que tener ganas de hacer las cosas bien y no tener una mente siniestra hambrienta de fama o una portada de LUN. Yo apoyo a María Colores, Javiera Mena, Denise Rosenthal, Manuel García, Gepe, Carla Morrison, Camila Moreno, La Guacha, Chico Trujillo, Madvanna, y tantos otros que se destaquen sin necesidad de coludirse con un canal inescrupuloso para generar un tongo que cause rechazo.
Pero sepa que si hablo de ellos es por convicción de que esto lo tiene que mostrar la televisión abierta. Dejemos de lado los prejuicios, los fundamentalismos, las termeces y los radicalismos. Aquí nadie sobra.