Me gusta que la gente que pertenece al espectáculo se una por un ideal. Así como ellos se unieron en busca de un país mejor y rompieron el medio, me gustaría que acá en Chile los actores, cantantes, animadores y gente del intelectualismo se uniera por un ideal que, es alejado de la política, sino que de un anhelo: El de una televisión mejor. En el que los Hector Morales, las Javieras Menas, las Anitas Tijoux, los Leo Caprile, y tantos otros relegados a segundo plano por culpa de la farándula, le hagan ver a los canales que también existen, que merecen una oportunidad, que se cansaron de ser ignorados por la tele de su propio país.
Si en Venezuela pudieron romper el miedo, acá también podemos. No digan que no. Es cuestión de voluntad.
