Primero, estos son los riesgos que hay cuando pones a un político manejando televisión. Pasó en Italia, donde un magnate de medios se convirtió en el presidente más inepto y frívolo del país de las pizzas, pasa en Argentina, donde el canal más farandulero de todos es manejado por un peronista del PRO como Francisco De Narváez, y pasó acá, donde Piñera hizo lo que quiso, implantó un modelo nefasto de tele centrado en farándula, aisló a los que de verdad sabían y apitutó a varias personalidades.
¿Tanto se demoró TimeWarner en remover de su cargo al creador del jingle del NO? ¿O saben otras cosas más que van salir a la luz pública, como sea, más adelante?
Hoy en la tarde, en su última oratoria en el canal, De Aguirre se despidió de sus trabajadores pidiendo disculpas por "lo que pudo haber hecho mal". Aparte del ya mencionado caso Soquimich, también podríamos agregar cuando matonearon ad hominem a Amaro Gomez-Pablos y a Daniel Alcaino en SQP, cuando fueron parte de la campaña de derribo a Camiroaga la cual tuvieron que bajar por motivos que todo mundo conoce, cuando hicieron de "Yingo" una fábrica de estereotipos juveniles -y menos mal que unos se dedicaron a la iglesia, y otras deleitan al público en programas de fitness en Fox Sports Chile-, cuando en "El diario de Eva" llegaron los pokemones, cuando CHV Noticias se viró a la crónica roja, a la nota del completo y ni le dieron importancia al Caso Penta, y un largo etcétera.
¿Qué vendrá en Chilevisión de aqui al resto de su existencia? No lo se. ¿Descubrirán los chanchullos, asociaciones ilicitas y corruptelas que hay en la farándula que ellos impulsaron? Ojalá. De hecho, si se descubre cómo algunos farandulitos se hicieron famosos o cómo funcionaban los tongos cuando Piñi era mandatario, estoy seguro que Los Tigres del Norte o Los Cuates de Sinaloa no tardarían en hacer otros de sus famosos "narcocorridos".
Lo que si se es que no hablaré de tincadas de nuevos ejecutivos o mis veredictos de cómo son hasta que estos asuman en el cargo. Mire que me he llevado hartas decepciones: Pato Hernández, Zamora, Nicolás Acuña, el mismo CHV en el 2010...
Y también que espero que de una vez por todas entre el aire fresco al 11.1, que 55 años de historia no pueden ser manchados con farándula ni contenidos vacuos. El cambio es posible y hay que generarlo. Tenemos que generarlo.
