Lastimosamente, la misma gente que pedía "renovación" e "innovación" en nuestras producciones dramáticas permitió que tuviese éxito una novela como "Papá a la deriva" cuyo guión reiterativo y poco novedoso se impuso ante el concepto de "realismo mágico" de "Matriarcas", ese del cual siempre hace gala la teledramaturgia brasilera. Que la novela de Quena Rencoret haya llegado a promediar 4 puntos significa que la gente este año estaba chalada... bueno, insisto, si es que a eso se le puede llamar "gente".
Lo triste de este año nefasto para la TV chilena es que el canal que históricamente ha innovado en cuanto a contenido en ficción simplemente no hiciera nada este año, o peor, haber cancelado una novela en producción para emitir una novela extranjera más barata pero poco exitosa.
Todo confluye en lo mismo: La necesidad de que tanto TVN como Canal 13 mejoren sus argumentos dramáticos para que asi tengan un buen piso para las no-ticias, y por qué no, en todo el resto de su programación. Creer que "Pobre Gallo", la nueva propuesta para el 2016, atrae algo de novedad y conceptos innovadores en la industria, es como creer que hay que apoyar a un producto chileno por el sólo hecho de ser chileno, o lo que es lo mismo, creer que "Royals" de Lorde merecía el Grammy.
Afortunadamente la repatriación de Vicente Sabatini por parte del canal público demuestra hacia dónde quiere virar el mismo. "Caleta del Sol" tenía mucho de las producciones de los 90s, sin embargo, le faltó consistencia y la historia ya es conocida. "Matriarcas" tiene un público muy fiel en redes sociales, pero la mala publicidad que la rodeó a través de medios digitales y portales como Fotech han hecho que el maldito rating no lo acompañara en este andar.
Por lo menos en Bellavista han querido ir un paso más allá en sus series incluyendo tópicos como la corrupción en la política o en los crímenes homofóbicos, pero los prejuicios continúan, la campaña sensacionalista se mantiene y los números no grafican el impacto en redes sociales. Canal 13 solo programó "Principes de Barrio" que tuvo un éxito moderado, y Chilevisión le pegó el palo al gato con "El bosque de Karadima".
Sin embargo, nada es suficiente mientras la fórmula quemadísima de "comedia barata con estereotipos de personajes" de Quena Rencoret y sus escenarios de cartón sigan teniendo injusto éxito en nuestras ficciones. Y acá no vale la excusa de que "Mega pasó de ser el canal que menos producciones nacionales hacía al que más realiza". ¿De qué sirve si todas son exactamente el mismo calco, el mismo vidrio, la misma comida para perros?
Por eso, sería bueno que Canal 13 hiciera una especie de "precalentamiento" para "Veinteañero a los 40" y empiece a programar ya "Los años dorados" de UCV Televisión -recordemos que llegaron a un acuerdo con el canal porteño-. No veo con buenos ojos que TVN no estrene nueva producción en marzo, sería arriesgado y poco convincente para la situación actual. Lo mejor sería que se estrene a la misma hora que "Pobre Gallo", lo mismo para la del canal mixto. Y obviamente Chilevisión tendrá que sobrevivir con las series que tiene y que debe dar no más para cumplir con el minutaje cultural más que por convicción.
Ojalá que en el 2016 la ficción tenga buena salud y no siga usando "cartones" para cumplir con la audiencia.
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