Un jovenzuelo penquista que es feliz a su manera. Técnico en Computación e Informática que actualmente busca trabajo y, en el intertanto, quiere aprender más el bello arte de armar y arreglar computadores. Combate por la TV de calidad y ama la música pop tanto como a su familia.

07 octubre 2014

Derrotemos la incapacidad

Incapaces. Esa es la palabra que describe a la televisión chilena actual. Son incapaces de generar nuevas audiencias, construir formatos adecuados para toda la familia, subir sus arcas con buenos métodos.

Incapaces de crear "la nueva televisión chilena", de refundarla, de replantearse y de tomar referentes gratos luego del auge, adueñamiento dictatorial y posterior caida -aunque sus "agentes" y laburadores lo nieguen- de la farándula en este país, ya sea por agotamiento de ideas o de rostrillos a los cuales sacarles el jugo y venderles a la gallá el cuento de que son modelos de vida, de que son ejemplos a seguir y que hay que imitarles su estilo.

Incapaces también de reencantar a las audiencias -sobre todo niños, jovenes y teenagers- quienes a falta de polos programáticos tuvieron que pedirle a sus mamás que pongan el cable, y los que no tienen el privilegio, se quedan aburridos, si es que no tienen algo más a disposición.

También son incapaces de intentar derribar a algo que siempre fue ganable: Las novelas turcas. Mega ganó injustamente una torta publicitaria sin mayor esfuerzo -digamos las cosas como son, no me cae mal ni la Sherezade ni la Fatmagul sin embargo no hay que ser brujo para saber que son un fenómeno de puro cuevazo-, sin una propuesta programática potente ni mucho menos una estructura concreta. Es más, luego de las turcas, el canal de Vicuña Mackenna será el mismo 13 de los realities: Programas buenos mezclados con basura. Y cómo no saberlo si Pato Hernández, el mismo que exprimió hasta el cansancio a Mundos Opuestos y Año 0, está al mando, y con la confianza de Carlos Heller que no tuvo en Mario Conca -y que lo sacaron de la dirección ejecutiva por menos de los cagazos de Pato-.

Y me quiero detener en un programa en específico: "Secreto a voces". Un programa que nació muerto, en una época en que los ejecutivos escogieron darle como bombo a la farándula porque los estudios de mercado y de audiencia -ingratos, como casi siempre- decían que era lo que la llevaba, que no tenía razones de seguir viviendo tampoco por más de que el mismo canal hablara maravillas en su sitio comercial y por intentar de ponerse pieles de otros programas -ni siquiera eran originales-, dejará de existir por fin este jueves -justo el día de mi cumpleaños, bonito regalo-. Este programa es fiel reflejo de las malas decisiones de los cabecillas de la televisión actual, y desde luego, los trabajadores de éste y de otros ciclos que murieron por su culpa, tuvieron que pagar el pato como tantas otras veces, ya sea por malas prioridades o derechamente falta de tino. Además, les recuerdo que si no fuera por Patito, hoy seguiríamos viendo "A todo o nada", reformulado y con nuevos brillos, como lo auguraban en Fotech antes de su injusta cancelación.

Y bueno, Chilevisión que casi no ha tenido éxitos este año y que la prensa farandulista no le dice nada y le perdona todo solo porque van segundos y terceros en las audiencias. Canal 13 y TVN reciben dia a dia la carroña de inescrupulosos periodistas, y a la televisora de Jaime de Aguirre, a la cual este año solamente les funcionó "Manos al fuego", "Sudamerican Rockers" y las noticias, nada de nada de un artículo. Pensar que Luis Hernán Browne tuvo que pagar los platos rotos de anteriores administraciones y el creador de la canción del No sigue ahí, creando una dictadura interna en el canal -y ojo, no lo digo yo, lo dijo Victor Gómez, el mismo del "olor a azufre"-.

Para replantear la televisión chilena no solo se necesita audacia, sino que también capacidad de estar en sintonía con el Chile de hoy. Y los ejecutivos actuales, salvo Carmen Gloria López y todos los que están actualmente en TVN -que espero que vayan a la próxima Mipcom a comprar series infantiles para el regreso de "Tronia" en gloria y majestad- y si es que Javier Urrutia, simplemente no dan el ancho, no están a la altura. ¿Cómo quieren recuperar los 8 mil millones de pesos que perdieron y la audiencia que se les fugó si siguen creando la misma televisión de hace 3 o 4 años? ¿Cómo?

Y lo peor es que ningún critico de televisión se los dice. Vasco Moulian no tiene autoridad moral para creerse lider de opinión, Larry Moe huele a farándula, solamente Luis Gonzalez, aka @Televisivamente, tiene las patas y los cojones de decir que la televisión chilena está mal. Y obviamente, su servidor, que sabe lo que dice porque alcanzó a ver y disfrutar cuando podía la televisión bonita que era la nuestra, y que se perdió gracias a ejecutivos sin gracia.

Ojalá que este año les sirva de lección y que el 2015, con la TV digital a la vuelta de la esquina, se replantee el modelo, porque éste, que está perdiendo la vigencia que ganó a mediados de 2010, ya no da para más. Y lo que más urge: Volver a reunir a los niños, jovenes y adultos con programas que sean apropiados y que uno sepa que nunca lo va a pasar mal. Es cosa de ver las producciones de Telefé o de algunos canales brasileños. ¿Aceptarán el desafío? ¿Recogerán el guante? Esperemos que si, y es necesario que digan que si.

DECLARACIÓN PÚBLICA: COMO TELEVIDENTES PEDIMOS Y EXIGIMOS RESPETOA nosotros como equipo, tanto como a ustedes que nos...

Posted by La tele según Caamaño on martes, 19 de enero de 2016