Esta es la historia de un compadre que se llamaba Harold Camping, gringo jubilado y evangélico, que creó una secta con chorroscientos miembros que un día, a través de una cadena radila llamada "Family Radio", llevó un mensaje advirtiendo que supuestamente ayer, a las 18.00 horas en Chile, iba a ocurrir el día del juicio final, y el 21 de octubre el temido Fin del Mundo.
Todos estaban expectantes a ver si este profeta anciano estaba en razón. El plazo fatal llegó, todos estaban preparados para el gran terremoto destructivo y el posterior rapto de los verdaderos cristianos, muchos empacaron sus cosas, se aferraron a la puerta si es que eso era necesario... Y no pasó nada de nada. Después dijeron que la cuestión iba a empezar a las 21.00 horas en nuestro país, la incertidumbre volvió, muchos juntaron a sus hijos y... Cri cri, cri cri, cri cri.
Nada de lo que profetizó ese vejete se hizo realidad. En fin, esto me permitió llegar a ciertas conclusiones:
La primera es que el habitante promedio de la Tierra se puede creer cualquier cosa que le digan sobre esa supuesta destrucción del planeta. Es cosa de ver lo que ocurrió en los días previos al cambio de milenio, donde muchos vaticinaban el fin de los objetos tecnológicos ya que no soportaban el "traspaso de siglo", sin embargo nada ocurrió. También la psicosis casi colectiva que se ha formado en cuanto al fin de los tiempos vaticinado para el 21 de diciembre del 2012 a la medianoche, donde hasta se hizo una película prediciendo lo que supuestamente va a ocurrir. En fin, yo simplemente no creo en esas profecías simplemente por lo que ocurrió el mismo 2000 -me van a creer que para esa fecha hubieron japoneses que se suicidaron-.
Y la picardía del chileno, esa que hace que nos tomemos todas las cosas con humor. Habían ciertos twitteros que de inmediato festinaron con la destrucción completa del pueblito inexistente de Macondo -a raíz de la canción del mismo nombre de Giolito y su combo-. Es que a profecía chanta, festinación inmediata.
Por ahora, los dejo con algo parecido que ocurrió en 31 Minutos que no se aleja para nada de la realidad.
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| Un nuevo día vendráaaaaaaaaaaa... |
Nada de lo que profetizó ese vejete se hizo realidad. En fin, esto me permitió llegar a ciertas conclusiones:
La primera es que el habitante promedio de la Tierra se puede creer cualquier cosa que le digan sobre esa supuesta destrucción del planeta. Es cosa de ver lo que ocurrió en los días previos al cambio de milenio, donde muchos vaticinaban el fin de los objetos tecnológicos ya que no soportaban el "traspaso de siglo", sin embargo nada ocurrió. También la psicosis casi colectiva que se ha formado en cuanto al fin de los tiempos vaticinado para el 21 de diciembre del 2012 a la medianoche, donde hasta se hizo una película prediciendo lo que supuestamente va a ocurrir. En fin, yo simplemente no creo en esas profecías simplemente por lo que ocurrió el mismo 2000 -me van a creer que para esa fecha hubieron japoneses que se suicidaron-.
Y la picardía del chileno, esa que hace que nos tomemos todas las cosas con humor. Habían ciertos twitteros que de inmediato festinaron con la destrucción completa del pueblito inexistente de Macondo -a raíz de la canción del mismo nombre de Giolito y su combo-. Es que a profecía chanta, festinación inmediata.
Por ahora, los dejo con algo parecido que ocurrió en 31 Minutos que no se aleja para nada de la realidad.
¿Giolito y su combo? ¿Qué es eso? Yo creí que lo de Macondo era por el libro Cien Años de Soledad.
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