Después de dos meses en antena, TVN decidió retirar de pantalla "Dime por qué", programa franjeado que iba a laas 17.00 hrs y que conducían Karen Doggenweiler y Julian Elfembein. La televisora argumenta la salida a que el programa "no logró madurar de acuerdo a sus objetivos, alcanzando un desempeño inferior a lo esperado", además de tomar la decisión de potenciarlos en el horario estelar.
Mi apreciación será corta, porque a ser francos, he visto pocas veces este programa, y de esas pocas, escasamente lo vi "en serio" -lo que significa verlo entre 10 y 15 minutos- y es la siguiente: Esas pocas veces que lo ví, se notó que el ritmo del espacio era muy, pero qué muy, demasiado lento. Además, como se concibió desde un principio, se enfocó demasiado en "la mujer" porque según los mandamases del canal estatal, eran ellas las que veían tele en las tardes -a lo mejor eso explica por qué los culebrones de Mega, Chilevisión y La Red sacan altos índices en comparación con "los titanes" que no pasan de los 2 puntos-. Craso error: Si vas a hacer un franjeado, hay que pensar en toda la familia, en tener un programa dinamico que se les dé en el gusto a todos. Sinceramente, en este programa nunca los hubo.
Si bien el fiato de Doggenweiler-Elfembein era bueno y se acertó en elegir a rostros enfocados a entretener, se vió que hacían cosas solamente para rellenar, lo cual castigó duramente la audiencia. Y precisamente ayer el espacio marcó 5 puntos, su índice de audiencia más alto de toda la temporada.
A ambos les va bien en los primes, ella con "La dieta del lagarto" que vuelve a su lugar luego de que "En su propia trampa" se fuera al domingo -en rigor la jugada del 13 fue para prepararle el piso a la segunda temporada de "Mi nombre es"-, y él con "Factor X" y en este tiempo con "Un minuto para ganar", que condenó a "Quiero mi fiesta" a estar bajo los 4 puntos. A lo mejor ese "plus" fue el que los juntara para hacer este programa que no hizo un buen cometido y que pasó a mejor vida, en un año que salvo a las excepciones antes expuestas, TVN no ha tenido un buen primer semestre.
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Mi apreciación será corta, porque a ser francos, he visto pocas veces este programa, y de esas pocas, escasamente lo vi "en serio" -lo que significa verlo entre 10 y 15 minutos- y es la siguiente: Esas pocas veces que lo ví, se notó que el ritmo del espacio era muy, pero qué muy, demasiado lento. Además, como se concibió desde un principio, se enfocó demasiado en "la mujer" porque según los mandamases del canal estatal, eran ellas las que veían tele en las tardes -a lo mejor eso explica por qué los culebrones de Mega, Chilevisión y La Red sacan altos índices en comparación con "los titanes" que no pasan de los 2 puntos-. Craso error: Si vas a hacer un franjeado, hay que pensar en toda la familia, en tener un programa dinamico que se les dé en el gusto a todos. Sinceramente, en este programa nunca los hubo.
Si bien el fiato de Doggenweiler-Elfembein era bueno y se acertó en elegir a rostros enfocados a entretener, se vió que hacían cosas solamente para rellenar, lo cual castigó duramente la audiencia. Y precisamente ayer el espacio marcó 5 puntos, su índice de audiencia más alto de toda la temporada.
A ambos les va bien en los primes, ella con "La dieta del lagarto" que vuelve a su lugar luego de que "En su propia trampa" se fuera al domingo -en rigor la jugada del 13 fue para prepararle el piso a la segunda temporada de "Mi nombre es"-, y él con "Factor X" y en este tiempo con "Un minuto para ganar", que condenó a "Quiero mi fiesta" a estar bajo los 4 puntos. A lo mejor ese "plus" fue el que los juntara para hacer este programa que no hizo un buen cometido y que pasó a mejor vida, en un año que salvo a las excepciones antes expuestas, TVN no ha tenido un buen primer semestre.
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