Ultimamente a la televisión pública chilena las cosas no le están saliendo sobre ruedas. Además de sus diarios cuestionamientos editoriales sobre el canal que dice "no hablar sobre temas de farándula" pero que igual trata temas en programas como el matinal o "Fruto prohibido"; se le suma los serios problemas de rating que han sido tendencia en el último tiempo, y algunos son:
-El poco arrastre que ha tenido su programación de tarde. "Esperanza" agarró un nicho exitoso, pero el resto ha sido un despelote total. Luego del repentino fin de "Dime por qué?" han desfilado un montón de teleseries. En la actualidad dan dos horas de "Heridas de amor" y además dan como 45 minutos de Ñoñ... cof, cof, "Niñas mal", respectivamente promedian 4 y 2 puntos de rating. Pobre no es, sino que pobrísimo.
-Un horario estelar que no seduce. No tengo nada en contra de algunos programas. "Inutiles y subversivos" hace humor absurdo, pero inteligente. "Vida" es un excelente aporte a la medicina didáctica que incluso la comparé con ese "morbo camuflado" llamado "Quiero un cambio". Pero el día martes, justo mientras el reality del 13 "Mundos opuestos" superaba los 30 puntos, el ciclo de reportajes medicos llegó a marcar un miserable punto de rating. Además, el ya mencionado "Fruto prohibido" (estelar que había empezado como avión con entrevistas a Antonio Banderas, pero que posteriormente mutó a ser un "Primer plano" del canal estatal) es derrotado hasta por "Secreto a voces". O sea, no podis perder contra SAV po, uno de los estandartes de la televisión basura que gobierna la tele de hoy. Eso sí, ratings aceptables tiene "La Ruta de Gengis Khan" y "Un minuto para ganar".
Entonces, ¿A quién le echamos la culpa de este bajón de rating del "canal de todos"?
Podríamos echarle la culpa a Mauro Valdés que desde que asumió que los programas no funcionan. Por ejemplo "Ala Chilena", una sitcom buenisima, pero que no vió nadie. O el ya mencionado "Dime por qué?". O el mitico "El experimento" que fue cortado a las semanas de haberse estrenado. Lo único que funcionó durante su administración fue "Factor X" que sacó datos de audiencia más que aceptables (aunque sigo esperando a los artistas potentes que son habituales en los "talent shows" creados por Simon Cowell), y "Un minuto para ganar" que puede hacerle el collereo al Teatro de Pato Torres en el canal sensacionalista. ¿Podríamos decir que Valdés está "farandulizando" al canal estatal?
O tal vez podríamos echarle la culpa a su director de programación cuyo nombre no recuerdo en este instante. Le ha costado enganchar a la audiencia. Pasó con el ya mencionado "Factor X" que le iba bien un día de emisión en la semana, pero los domingos era derrotado por masacre ante un gigante como lo fue "Mi nombre es". Ante eso pasó al martes, y tuvo que esperar que terminara ese bodrio de marca mayor llamado "Fiebre de baile" para conseguir el liderazgo de su franja.
O quizá le echaríamos la culpa a la misma audiencia, que puede premiar con puntos y con rentabilidad a un canal cuyo modelo es nefasto ("Sin Dios ni ley") donde todo vale con tal de buscarle el morbo oculto a los televidentes; pero que no sabe diferenciar entre un programa educativo y didactico como "Vida" de un programa farandulerico como "FDB". ¿Qué pasa entonces?
Es de esperar que "el canal de Chile" se levante y pueda por fin cumplir con su misión de aspirar a una televisión de clase mundial, como dicen en sus inicios y cierres de transmisiones. Y que haya un modelo y una línea que se respete, la cual definiría como "abierta pero responsable".
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-El poco arrastre que ha tenido su programación de tarde. "Esperanza" agarró un nicho exitoso, pero el resto ha sido un despelote total. Luego del repentino fin de "Dime por qué?" han desfilado un montón de teleseries. En la actualidad dan dos horas de "Heridas de amor" y además dan como 45 minutos de Ñoñ... cof, cof, "Niñas mal", respectivamente promedian 4 y 2 puntos de rating. Pobre no es, sino que pobrísimo.
-Un horario estelar que no seduce. No tengo nada en contra de algunos programas. "Inutiles y subversivos" hace humor absurdo, pero inteligente. "Vida" es un excelente aporte a la medicina didáctica que incluso la comparé con ese "morbo camuflado" llamado "Quiero un cambio". Pero el día martes, justo mientras el reality del 13 "Mundos opuestos" superaba los 30 puntos, el ciclo de reportajes medicos llegó a marcar un miserable punto de rating. Además, el ya mencionado "Fruto prohibido" (estelar que había empezado como avión con entrevistas a Antonio Banderas, pero que posteriormente mutó a ser un "Primer plano" del canal estatal) es derrotado hasta por "Secreto a voces". O sea, no podis perder contra SAV po, uno de los estandartes de la televisión basura que gobierna la tele de hoy. Eso sí, ratings aceptables tiene "La Ruta de Gengis Khan" y "Un minuto para ganar".
Entonces, ¿A quién le echamos la culpa de este bajón de rating del "canal de todos"?
Podríamos echarle la culpa a Mauro Valdés que desde que asumió que los programas no funcionan. Por ejemplo "Ala Chilena", una sitcom buenisima, pero que no vió nadie. O el ya mencionado "Dime por qué?". O el mitico "El experimento" que fue cortado a las semanas de haberse estrenado. Lo único que funcionó durante su administración fue "Factor X" que sacó datos de audiencia más que aceptables (aunque sigo esperando a los artistas potentes que son habituales en los "talent shows" creados por Simon Cowell), y "Un minuto para ganar" que puede hacerle el collereo al Teatro de Pato Torres en el canal sensacionalista. ¿Podríamos decir que Valdés está "farandulizando" al canal estatal?
O tal vez podríamos echarle la culpa a su director de programación cuyo nombre no recuerdo en este instante. Le ha costado enganchar a la audiencia. Pasó con el ya mencionado "Factor X" que le iba bien un día de emisión en la semana, pero los domingos era derrotado por masacre ante un gigante como lo fue "Mi nombre es". Ante eso pasó al martes, y tuvo que esperar que terminara ese bodrio de marca mayor llamado "Fiebre de baile" para conseguir el liderazgo de su franja.
O quizá le echaríamos la culpa a la misma audiencia, que puede premiar con puntos y con rentabilidad a un canal cuyo modelo es nefasto ("Sin Dios ni ley") donde todo vale con tal de buscarle el morbo oculto a los televidentes; pero que no sabe diferenciar entre un programa educativo y didactico como "Vida" de un programa farandulerico como "FDB". ¿Qué pasa entonces?
Es de esperar que "el canal de Chile" se levante y pueda por fin cumplir con su misión de aspirar a una televisión de clase mundial, como dicen en sus inicios y cierres de transmisiones. Y que haya un modelo y una línea que se respete, la cual definiría como "abierta pero responsable".
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