En este país hay escasez de estrellas de renombre, más puntualmente de artistas del momento. No hay nada para ellos y las pocas ideas buenas que hay terminan cancelándose por razones imbéciles -¿tengo que mencionar por enésima vez el Screamfest?-. Para peor, lo que empezó siendo un polo ideal para bandas emergentes y consolidadas de la misma forma que es el "Vive Latino", termina vendiéndose a la gallá como uno más del montón. Y me quiero detener en uno en especial: El Crush Power Music.
Cuando empezó el evento de la popular gaseosa, trajeron a bandas como Molotov, Ximena Sariñana, Attaque 77, Plastilina Mosh, Calle 13 -antes de que les picara el bichito boliburgués-, Bersuit Vergarabat, Catupecu Machu, El Otro Yo -antes de recibir el gentil auspicio de La Cámpora-, Smitten y que acogió a emergentes y consolidados nacionales como Tronic, Lucybell, Chancho en Piedra, Saiko, Los Bunkers, Magmamix, Juana Fe, Teleradio Donoso, La Floripondio y Banda Conmoción vivió una extraña pero repudiable metamorfosis, les picó la araña bellaka y el cartel se llenó de chipamoglis como Los Pibes Chorros, Amar Azul, Nene Malo y Los Wachiturros, cómo olvidar la feroz silbatina que recibieron durante su actuación hace un par de años atrás.
Y este año no será la excepción, puesto que el line-up de ese eventucho estará encabezado por Ráfaga (!), Tito el Bambino -por favor, hasta Paulina Rubio canta mejor que él y eso ya es decir mucho, sino recordemos cuando se presentó en el Festival de Iquique 2012-, DJ Méndez y lo único decentito sería Jordan y Tomo Como Rey. Pero raya para la suma, por cada 2 buenos, hay 3 malos.
Lo que debió ser "El Lollapalooza de los picados" o lo que siempre debió ser, o mejor aun, un cototudo festival popero a falta de "El Evento 40" -increible que todas las radios de IARC tengan su show en el Movistar Arena y "la radio de los éxitos" no tenga ni de coña-, se transformó en un palacete de lingotes de oro, bling bling y harto peinado sopaipa. Y lo peor es que cuando nos urge un evento con todas las de la ley, con brillos, chayas, serpentinas y toda la casa por la ventana, nos ofrecen algo bastante alejado de cómo se presentaron en la actualidad.
Y esto es otra muestra de lo aislados que estamos los que pedimos algo diferente.
Sino, miren el comercial y cómo se promocionan. "Va mi grupo favorito (!), esos que vengo escuchando desde hace tiempo (!!), los que me prenden y me hacen bailar (!!!), a los que les pido una foto cada vez que los veo (!!!!) y los que siempre espero volver a ver (...)". ¡Un poquito de por favor! Esos textos déjenselos a Rock in Rio, o en el remoto caso de que iHeartRadio llegase a Chile con su riqueza de plataforma y hiciesen un evento como el que hacen en USA, no para una bosta más traicionera que MTV o el área deportiva de TVN.
En fin, tal vez no sea el público al que apuntan ellos ni mucho menos al que apuntan el Lolla, Pulsar, Primavera Fauna, Ñam, Maquinaria o Monsters of Rock, pero es que ya es tiempo de que rompan el chanchito e innoven. No cuesta casi nada. Si esto fuese Argentina, el Crush Power Music seguiría firme con sus principios, y otras ideas prosperarían.
¿Qué pasó CPM? Antes eran chéveres.
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Cuando empezó el evento de la popular gaseosa, trajeron a bandas como Molotov, Ximena Sariñana, Attaque 77, Plastilina Mosh, Calle 13 -antes de que les picara el bichito boliburgués-, Bersuit Vergarabat, Catupecu Machu, El Otro Yo -antes de recibir el gentil auspicio de La Cámpora-, Smitten y que acogió a emergentes y consolidados nacionales como Tronic, Lucybell, Chancho en Piedra, Saiko, Los Bunkers, Magmamix, Juana Fe, Teleradio Donoso, La Floripondio y Banda Conmoción vivió una extraña pero repudiable metamorfosis, les picó la araña bellaka y el cartel se llenó de chipamoglis como Los Pibes Chorros, Amar Azul, Nene Malo y Los Wachiturros, cómo olvidar la feroz silbatina que recibieron durante su actuación hace un par de años atrás.
Y este año no será la excepción, puesto que el line-up de ese eventucho estará encabezado por Ráfaga (!), Tito el Bambino -por favor, hasta Paulina Rubio canta mejor que él y eso ya es decir mucho, sino recordemos cuando se presentó en el Festival de Iquique 2012-, DJ Méndez y lo único decentito sería Jordan y Tomo Como Rey. Pero raya para la suma, por cada 2 buenos, hay 3 malos.
Lo que debió ser "El Lollapalooza de los picados" o lo que siempre debió ser, o mejor aun, un cototudo festival popero a falta de "El Evento 40" -increible que todas las radios de IARC tengan su show en el Movistar Arena y "la radio de los éxitos" no tenga ni de coña-, se transformó en un palacete de lingotes de oro, bling bling y harto peinado sopaipa. Y lo peor es que cuando nos urge un evento con todas las de la ley, con brillos, chayas, serpentinas y toda la casa por la ventana, nos ofrecen algo bastante alejado de cómo se presentaron en la actualidad.
Y esto es otra muestra de lo aislados que estamos los que pedimos algo diferente.
Sino, miren el comercial y cómo se promocionan. "Va mi grupo favorito (!), esos que vengo escuchando desde hace tiempo (!!), los que me prenden y me hacen bailar (!!!), a los que les pido una foto cada vez que los veo (!!!!) y los que siempre espero volver a ver (...)". ¡Un poquito de por favor! Esos textos déjenselos a Rock in Rio, o en el remoto caso de que iHeartRadio llegase a Chile con su riqueza de plataforma y hiciesen un evento como el que hacen en USA, no para una bosta más traicionera que MTV o el área deportiva de TVN.
En fin, tal vez no sea el público al que apuntan ellos ni mucho menos al que apuntan el Lolla, Pulsar, Primavera Fauna, Ñam, Maquinaria o Monsters of Rock, pero es que ya es tiempo de que rompan el chanchito e innoven. No cuesta casi nada. Si esto fuese Argentina, el Crush Power Music seguiría firme con sus principios, y otras ideas prosperarían.
¿Qué pasó CPM? Antes eran chéveres.