Siguiendo en la senda de estas columnas pre-festivaleras, debo prenunciar mi inquietud acerca de todo este sistema que la Comisión Organizadora realizó para este certamen, y que en su mayoria terminan siendo pesimas decisiones.
Parto por la decisión de cambiar toda la parrilla, si antes comenzaba un miercoles y terminaba un lunes, ahora comienza un lunes y termina un sábado. ¡No hay salud! Además mata la magia que tenia uno antes, porque todos sabíamos que el lunes era la gala, donde todo pasa y los vestidos tipo pastel de matrimonio florecían. Los sabados era la tallarinata de los animadores a la prensa y los domingos la bendición del episcopado. Asi que lo que hizo la Comisión no fue precisamente darle un toque distinto al festival de este año, sino simplemente matar la magia.
Otra cosa que me cambiaron fue la del premio que se le entregaba al público. Hasta cierta emisión de “Viña tiene festival”, no sabia que existía antes de la antorcha y la gaviota –con “Gaviota de la paz” en el 91 y el 93- una lira, que este año vuelve pero no se si se le entrega a la competencia o a todos los artistas de una carrera. ¿Y mi querida gaviota?
Ahora la gala se movió a un viernes, pero no sabemos si va a ser en la semana pre-festivalera o en la misma semana del festival. Asi se puede causar un enredo de aquellos, ya que nadie puede ir a animar y al mismo tiempo asistir a la gala. A menos que dejes pregrabado una competencia, claro está.
Espero que no se vuelva a repetir este mismo esquema que quisieron hacer este año, porque la verdad es que los cambios son pesimos.
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Parto por la decisión de cambiar toda la parrilla, si antes comenzaba un miercoles y terminaba un lunes, ahora comienza un lunes y termina un sábado. ¡No hay salud! Además mata la magia que tenia uno antes, porque todos sabíamos que el lunes era la gala, donde todo pasa y los vestidos tipo pastel de matrimonio florecían. Los sabados era la tallarinata de los animadores a la prensa y los domingos la bendición del episcopado. Asi que lo que hizo la Comisión no fue precisamente darle un toque distinto al festival de este año, sino simplemente matar la magia.
Otra cosa que me cambiaron fue la del premio que se le entregaba al público. Hasta cierta emisión de “Viña tiene festival”, no sabia que existía antes de la antorcha y la gaviota –con “Gaviota de la paz” en el 91 y el 93- una lira, que este año vuelve pero no se si se le entrega a la competencia o a todos los artistas de una carrera. ¿Y mi querida gaviota?
Ahora la gala se movió a un viernes, pero no sabemos si va a ser en la semana pre-festivalera o en la misma semana del festival. Asi se puede causar un enredo de aquellos, ya que nadie puede ir a animar y al mismo tiempo asistir a la gala. A menos que dejes pregrabado una competencia, claro está.
Espero que no se vuelva a repetir este mismo esquema que quisieron hacer este año, porque la verdad es que los cambios son pesimos.
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