Voy a darles solo un ejemplo de lo que les planteo: ¿Se acuerda cuando "Pollo en conserva" llegó a marcar 0 puntos y al día siguiente aparecieron cartas en los diarios con gente que vió el programa en el momento en que tuvo un piso de huevo? ¿Por qué "31 minutos", que lo ve tanta gente no solo en Chile, sino que en el exterior, solamente la empresa de capitales brasileños marca 8 puntos, cuando todos sabemos que en todo el país lo vieron?
¿Qué onda? ¿Jelou? ¿Se desprogramaron los aparatitos? ¿Coima? ¿Chanchullo? ¿Corruptela? De ser así debería ser tema para "Informe especial", pero yo no soy partidario de conspiraciones salfatescas.
Lo que sí queda claro es que a veces TimeIbope se equivoca al hacer las mediciones.
Porque habemos muchos que vemos "Estamos invitados" y "El informante" aun cuando no superan los 10 puntos. Porque más allá de que sea avalado por organizaciones que no sabemos de dónde salieron, y más allá de que estadisticamente puede ser preciso, a veces entrega datos demasiado sesgados, como lo hace con el show de marionetas de Aplaplac.
¿Es justo que Tulio y compañía, cuyas aventuras seguimos semana a semana, solamente marquen entre 6 y 8 puntos? Yo creo que no.
Y muchas veces la empresa brazuca se ha equivocado. Mi amigo Eriol T. Harlaown, columnista de ANMTVLA, lo dice: Hay que agrandar el muestreo. Se puede y se debe. Ahora que suscribieron una alianza con Twitter sabremos a ciencia cierta qué es lo que está viendo la gente.
Pero de todas maneras no es suficiente, es un monopolio de mediciones de audiencias en la TV chilena. En Argentina, esta semana el estado creó una medidora: SIFEMA -más conocido como "SIJEFA"-, y convive de igual manera con Ibope. ¿Qué pasaría si acá en Chile existiera la GfK, que hace mediciones en gran parte de Europa en base a audímetros? Quizá el panorama cambiaría radicalmente.
Porque insisto: El rating no sirve para evaluar calidad sino que para ponerle precio a la publicidad y para confinar a programas valiosos a "slots de la muerte". Solo funciona para hacer pasar varios dolores de cabeza a directores de programación, dispuestos a todo para liderar.
TimeIbope se equivoca. Y vaya que lo hace. Si solo está en 5 regiones del país.
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¿Qué onda? ¿Jelou? ¿Se desprogramaron los aparatitos? ¿Coima? ¿Chanchullo? ¿Corruptela? De ser así debería ser tema para "Informe especial", pero yo no soy partidario de conspiraciones salfatescas.
Lo que sí queda claro es que a veces TimeIbope se equivoca al hacer las mediciones.
Porque habemos muchos que vemos "Estamos invitados" y "El informante" aun cuando no superan los 10 puntos. Porque más allá de que sea avalado por organizaciones que no sabemos de dónde salieron, y más allá de que estadisticamente puede ser preciso, a veces entrega datos demasiado sesgados, como lo hace con el show de marionetas de Aplaplac.
¿Es justo que Tulio y compañía, cuyas aventuras seguimos semana a semana, solamente marquen entre 6 y 8 puntos? Yo creo que no.
Y muchas veces la empresa brazuca se ha equivocado. Mi amigo Eriol T. Harlaown, columnista de ANMTVLA, lo dice: Hay que agrandar el muestreo. Se puede y se debe. Ahora que suscribieron una alianza con Twitter sabremos a ciencia cierta qué es lo que está viendo la gente.
Pero de todas maneras no es suficiente, es un monopolio de mediciones de audiencias en la TV chilena. En Argentina, esta semana el estado creó una medidora: SIFEMA -más conocido como "SIJEFA"-, y convive de igual manera con Ibope. ¿Qué pasaría si acá en Chile existiera la GfK, que hace mediciones en gran parte de Europa en base a audímetros? Quizá el panorama cambiaría radicalmente.
Porque insisto: El rating no sirve para evaluar calidad sino que para ponerle precio a la publicidad y para confinar a programas valiosos a "slots de la muerte". Solo funciona para hacer pasar varios dolores de cabeza a directores de programación, dispuestos a todo para liderar.
TimeIbope se equivoca. Y vaya que lo hace. Si solo está en 5 regiones del país.